jueves, 1 de diciembre de 2011

Cinchada

La mujer bajó la cabeza y dirigiendo una mirada fulminante hacia el niño, dijo:
-¡O te callas, o te mato!
Una señora que pasaba por allí al ver lo que estaba sucediendo se detuvo y sin siquiera pensarlo tomó al niño de una mano queriendo llevarlo consigo.