Pequeño Victor.
Si estás leyendo esto es porque probablemente yo ya esté muerto, y obviamente porque ya has aprendido a leer, lo cual es una gran satisfacción (si la revista Orsai sigue existiendo deberías leerla). Pero eso no es lo que nos atañe en este momento, volvamos pues al meollo de la cuestión. Supongo ya sabrás que eres un bebé probeta, si no, deberías saberlo, y aunque esta no sea la mejor manera, siempre he pensado que es mejor decir las cosas sin vueltas.